CIRUGÍAS DE TERCERAS MOLARES

El tercer molar es el diente que con mayor frecuencia no finaliza su proceso normal de erupción, provocando diferentes complicaciones desde el punto de vista clínico como la periocoronaritis, la periodontitis, la carie, la reabsorción de las raíces de los segundos molares inferiores, la formación de quistes dentígenos, el desbalance oclusal y disfunsiones en la articulación temporomandibular (ATM).

Siempre ha existido polémica entre cirujanos maxilofaciales y ortodoncistas sobre si los terceros molares retenidos provocan apiñamiento o no, y también sobre la necesidad de tratamiento quirúrgico. Es por ello que la situación de los terceros molares y las complicaciones existentes antes y después de su odontectomía, muchas veces necesaria, ha sido motivo de estudio por diferentes autores en el mundo.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS

Un número elevado de pacientes con tercer molar retenido no presentan síntomas y son repentinamente informados por el estomatólogo de su presencia al realizarle un examen radiológico o al ver el aumento de volumen de consistencia dura en la zona donde van los terceros molares. Cuando el paciente refiere molestias, generalmente estos dientes están infectados, asociados a una pericoronaritis. Refieren dolor, inflamación de la cara, trismos o limitación de la apertura bucal, halitosis, sensibilidad con aumento de volumen de los ganglios submaxilares.

Si el paciente es portador de una prótesis inferior, ya sea total o parcial, y un tercer molar inferior empieza a brotar, se queja de que la prótesis no se le adapta, y que le ocasiona dolor al masticar.

Se reconoce por la comunidad científica, que un individuo puede heredar los maxilares pequeños de un progenitor y los dientes grandes de otros, o al revés por lo que tendría mayor probabilidad de retención dentaria

Todo diente retenido es susceptible de producir múltiples afecciones patológicas. Pueden presentarse accidentes mecánicos, tumorales, infecciosos, sensitivos, motores y otros.

Cuando se decide la extracción de un diente retenido este debe ser minuciosamente estudiado, analizando el tipo de retención y su relación con estructuras adyacentes. Múltiples son los accidentes y complicaciones que pueden presentarse durante el trans y postoperatorio.

Entre las complicaciones postoperatorias más frecuentes se destacan el dolor, el edema, el trismo, la hemorragia, la infección y las complicaciones nerviosas. Como la extracción de dientes retenidos es un proceder quirúrgico muy común, nos trazamos como objetivo en nuestras cirugías tener todos los estudios previos, como radiografías y todo el arsenal médico quirúrgico, para poder realizar la cirugía con éxito y así tener un post operatorio relajado para el paciente.